Me preguntan a menudo esto como buscando un elemento diferenciador, casi mágico que haga que nuestro pitch nos lleve al éxito.
Lo primero, como ya he comentado alguna vez, es redefinir el concepto de éxito, pero eso sigue pendiente para otra entrada del blog.
Lo segundo sería dejar claro que no hay fórmulas mágicas. Ni siquiera algo que hizo que tu anterior pith te llevara donde querías, garantiza el éxito en el próximo pitch.
Lo lógico sería pensar que la pasión es lo primordial a la hora de hacer el pitch. Pasión por tu proyecto y pasión por tu profesión. Y es cierto. Es una condición fundamental para conseguir socios o recursos haciendo pitch. Pero hay dos problemas con este elemento fundamental. Uno es que es como el valor de los soldados, que se les supone. Se sobre entiende que alguien que está buscando recursos para sacar adelante su proyecto, tiene pasión. El otro problema es que no siempre se tiene la energía para mostrar esa pasión. O de la forma en que uno la muestra puede no ser afín o del agrado del de enfrente.
Por eso yo, por encima incluso de la pasión, creo que el elemento más importante para un pitch exitoso es la estructura.
La estructura del propio pitch.
¿Por qué es tan importante para mí? Por muchos motivos.
Si preferís ver el vídeo que hice sobre esto en lugar de leer el blog, pinchad aquí.
Para los que seguís leyendo, estas son las razones:
Una estructura os permite iniciar el pitch en cualquier situación.
Os permite dar una imagen de orden y profesionalidad.
Os permite recordar los elementos fundamentales del proyecto más fácilmente.
Permite a la persona que os escucha recordar esos elementos a posteriori, que es una de las claves del éxito de un pitch.
Os permite gestionar mejor el tiempo en caso de que este esté limitado o definido.
Os permite retomar facilmente si hay interrupciones.
Debe ser una estructura flexible pero sólida, donde esté todo lo que queréis comunicar en la cantidad justa y en el lugar adecuado. Pero que pueda adaptarse a distintas situaciones y distintas personas.
En este vídeo
os doy un ejemplo de estructura que puede ser un buen punto de partida.
Y luego está lo básico de usar una estructura. Al igual que una película, una estructura le da sentido a la historia, y la hace más fácil de seguir y de disfrutar. Evita que la persona que te escucha se pierda o se quede fría, que no se emocione.
Si no se despierta ninguna emoción será difícil que recuerden vuestro pitch. Y si no es un pitch claro, se cumplirá una de las premisas básicas del marketing: "Una mente confusa no compra".